Él bebe de un año y medio estaba sentado pintando con
algunos creyones sobre una hoja blanca, de lejos, lo observa su abuela que al instante se da
cuenta que la punta de los creyones ya está muy desgastada y no pintan bien,
por lo que se decide a tomarlos para sacarles más punta y así el niño pueda
seguir pintando feliz… sin embargo la reacción del niño no es la esperada…
cuando se ve desprovisto de sus apreciados colores al instante rompe en llanto,
el no entiende lo que está pasando, solo sabe
que aquello a lo cual estaba aferrado se ha ido… se siente frustrado,
triste, y hasta desesperado… lo que no entendía es que algunos segundos después
esos colores volverían a sus manos mejores, con más punta y útiles para pintar
por mucho tiempo más!
La actitud de este bebé me recordó la actitud de muchos
creyentes; Dios como Padre siempre quiere lo mejor para cada uno de nosotros, él
sabe lo que nos conviene y lo que no nos
conviene, sabe cómo saciarnos y que darnos para ser felices… el asunto es que
muchas veces para recibir lo que Dios ha
planeado se necesitan cambios, y esos cambios pueden significar entregar algo, hacer
algo o pasar por circunstancias que al momento te parecen “horribles”, sin
embargo esos cambios o circunstancias duras muy probablemente te llevan a una
bendición posterior. La Biblia dice que:
“Mis caminos y mis pensamientos son más altos que los de
ustedes; ¡más altos que los cielos sobre
la tierra!” Isaías 55:9 NVI
y también:
“Pues si ustedes, aun
siendo malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más su Padre que está
en el cielo dará cosas buenas a los que le pidan!” Mateo 7:11 NVI
Así que, podemos creer que Dios tiene el control, y si
permite que pasemos por momentos duros, carencias o situaciones que no
entendemos, es porque adelante recibiremos algo mejor. Tengo que aclararte que
a veces eso “mejor que viene” es mejor bajo la perspectiva de Dios, es decir,
que en ocasiones lo que Dios está haciendo puede que no te guste mucho, pero sin
dudarlo te digo, que siempre lo que él hace es lo mejor; piensa por ejemplo en
un niño al cual su mamá le quita un dulce para darle un plato de sopa; al niño no
le gustará mucho, pero solo así será alimentado.
Los pensamientos que Dios tiene para ti son de bien y no de
mal, él te ama, él quiere lo mejor para ti, así que hoy, descansa confiado en
lo que él está haciendo y espera, la bendición está por venir!
No hay comentarios:
Publicar un comentario